El Centro de Estudios Especializados en Trastornos de Ansiedad (CEETA) emitió un informe especial sobre la Nomofobia o miedo irracional a no estar conectados a través del celular. Estos casos aumentaron en los últimos días debido a las fallas en los servicios de telefonía celular en la Argentina.
“Lamentablemente estos dispositivos son una solución para muchas personas pero para otras, con cierta propensión, son un verdadero problema a sufrir niveles altos de ansiedad, lo que se viene acentuando con las fallas en el servicio que se evidenciaron los últimos tiempos y que no permite una comunicación fluida”, indica la Lic. Gabriela Martínez Castro, directora del CEETA.
Hay personas que ante la falta de celular sufren nerviosismo, sudaración, contracturas, irritabilidad, necesidad rápida de tener a mano el celular y en casos más graves, posibilidades de sufrir un ataque de pánico y otras patologías relacionadas con la ansiedad porque el celular nos permite tener ciertas situaciones bajo control como lo relacionado con lo académico, el trabajo, lo social, entre otras.
Si sos de las personas que estos días, en que las líneas están colapsadas y las empresas no están brindando un buen servicio, entran en pánico y los invade la ansiedad por sentirse desconectados del resto del mundo, puede ser que seas uno de los muchos alrededor del mundo que sufren de nomofobia.
Salir a la calle sin celular o que el mismo no funcione como se espera puede crear inestabilidad, agresividad y dificultades de concentración (síntomas típicos de los trastornos de ansiedad). Suele estar acompañada de síntomas tales como malestar general, hipervigilancia, inquietud, temor a estar desconectado o aislado, comportamientos de reaseguro: sentir que el teléfono o las conversaciones mantenidas generan tranquilidad, rechequeo de mensajes, mails y visitas a las páginas de redes sociales, pérdida de oportunidades laborales, consulta permanente de noticias, preocupación desmedida por lo que pudiera suceder si la persona no está conectada, crisis de pánico, agorafobia.
Según informes, este padecimiento creció 13% en los últimos cuatro años, debido a que cada vez son más los consumidores que se ven atados a sus teléfonos inteligentes y a que la tecnología es cada vez más accesible y económica
Las personas que padecen de nomofobia expresan que su teléfono es su vida, que lo es todo, y les brinda la sensación sobre todo de sentirse acompañados.
Las mujeres y los adolescentes suelen ser más propensos a padecerla.
“A los adolescentes porque están fuera del contacto con sus redes sociales y también porque quedan fuera del alcance de sus padres, a quien tienen como forma de protección a través del celular”, asegura Martínez Castro.
“Y en las mujeres, por los múltiples roles (laboral, académico, familiar, coordinación del hogar, etc) y por cuestiones biológicas que afectan directamente lo hormonal y aumenta la necesidad de control para evitar futuros eventos negativos”, agrega.
Los adultos significativos en la vida de los niños ejercen una influencia importantísima a través de su comportamiento llevando a situaciones tales como no poder dejarlo incluso en los momentos de reunión familiar como puede ser compartir una cena o reunión.
“Cuando afecta la vida cotidiana, cuando se dan síntomas físicos y psíquicos hay que consulta inmediatamente a un especialista porque estos trastornos de ansiedad van evolucionando con el tiempo y no se pueden resolver de otra forma que no sea con un tratamiento adecuado, como la terapia cognitivo-conductual”, indica la especialista en trastornos de ansiedad.
También hay TIPS, como chequear el celular dos o tres veces durante las vacaciones, durante el período laboral apagar el celular mientras se cena, mientras hay eventos, encuentros familiares, desconectarlo al dormir, tener tiempos para la utilización, sobre todo en niños y adolescentes.
El tratamiento
Según los especialistas la clave es aprender a controlarse, desprenderse del móvil de forma gradual, afrontar de forma aislada las sensaciones y pensamientos negativos derivados de este padecimiento como pueden ser las crisis de pánico
Para prevenir este problema, se recomienda a los padres evitar que los hijos tengan conexión a la red desde su habitación y establecer unos horarios para un uso correcto de las tecnologías.
Hay que separar momentos. La noche es para dormir y, por lo tanto, el móvil debe de estar apagado; del mismo modo, que la cena es para comer y no para estar con el móvil.
Si ya has detectado que pudieras tener algunos de estos síntomas, lo mejor es que asistas a un psicólogo para atajar el problema lo antes posible.